miércoles, 24 de diciembre de 2008

ARZOBISPO UGARTE Y EL CUSCO

En mi paso por la plaza de armas no podia dejar de visitar al emblemático Café Ayllu como de costumbre para degustar los exquisitos jugos y los ricos pasteles de manzana y de paso hechar una mirada al libro de comentarios, donde los visitantes hacen plegarias al arzobispado para que no desaloje al Ayllu. El libro de 172 folios esta repleto de comentatarios en tonos diversos contra el clero, donde se subraya lo indignante que resulta para los cusqueños, de que el arzobispado pretenda desalojar al querido Café Ayllu para alquilar a una cadena de cafeterías extranjeras… el nombre que suena mucho es Starbucks.

No se trata de un lugar que evoca recuerdos nostálgicos menos es parte del romantisismo trasnochado, tampoco se pretende convertir en un monumento por las virtudes que jamás otra cafetería a tenido. Pero indigna el abuso que comete el arzobispo con su actitud maquiavélica y mercantilista.

No es la primera vez que el Arzobispo Juán Antonio demuestra su actitud gansteril por el dinero; recordemos en esta administración el circuito de la catedral ha sido retirado del boleto turístico y se ha constituido su propio circuito. ¿Dónde van los ingresos provenientes del circuito turístico? ¿Cómo es que se invierten o gastan?No he logrado encontrar respuestas a estas preguntas (si por alli alguien sabe por favor, cuenten).

Para restaurar la Catedral luego del terremoto de 1986 se han invertido en largos años fondos públicos como los de cooperación española. ¿No debería estar informada la ciudadanía que es lo que se hace con estos fondos que se generan a partir del patrimonio monumental de todos y del turismo? Asociado a esto, hay un afán de lucro con las preferencias que se dieron a la agencia de viajes del “sobrino” del arzobispo, que ofrecía tours exclusivos a ciertas colecciones restringidas de joyas de la catedral (denunciado por la Asociación de Agencias de Viaje del Cusco).

El Arzobispado actúa como si los bienes que están bajo su custodia fueran suyos y no del pueblo del Cusco. Un ejemplo patético es haber colocado "trapos" para que no se vea el catedral en el concierto del grupo Libido, luego prohibio que el atrio y la plaza de armas se utilice para fiestas y actividades sociales hasta pretendió enrejar.

Otra joyita del Arzobispo es la manifiesta indifefencia contra el Instituto Pastoral Andina-IPA- consolidado por los arzobispos Ricardo Durand, Luis Dalle y Luis Vallejos. El IPA publica Allpanchis desde 1969, es una revista de las ciencias sociales del Sur Andino en temas religiosos y culturales. Todo parece indicar que el actual arzobispo no tiene el menor interés en este tipo de labor cultural.

El arzobispo no entiende donde esta, ¿sí forma a los seguidores del Opus Dei? no respeta a nadie, le importa un comino. Ahora pretende desalojar al Café Ayllu de la plaza de armas si sucede los cusqueños estan dispuestos tomar medidas extremas en su defensa si es necesario tomar el catedral y otros centros religiosos.

La partida de Monseñor Vallejos en 1982 dejo un profundo dolor en el Cusco, un abismal diferencia a este arzobispo (Juan Antonio Ugarte Pérez). Ojala pronto tenga que coger sus maletas e irse señor Ugarte o esta esperando que el pueblo se levante, aquí no lo queremos. Estoy seguro que los cusqueños nos regocijaremos cuando su ilustre y angurriento trasero se vaya del Cusco (Guillermo Salas).

(*)Ver la columna de Nicolas Lynch, la noticia en Andina, el post de Renzo Guerrero y un post relacionado de Derik Latorre.

1 comentario:

Guillermo Salas Carreño dijo...

Gracias por citar un texto mio. Sin embargo les agradeceré mucho que corrijan todos los cambios que han hecho en él. No tiene ningún derecho a modificarlo, a quitar fragmentos, a#adir frases y adjetivos aquí y allá.
Les agradezco de antemano.